Afecciones más frecuentes

Imaginemos un caso con severa sensación de “pesadez”, en combinación con un gran malestar. Las molestias se convierten en dolores ante cualquier tipo de esfuerzo. Con el tiempo, “la pesadez” empeora y se transforma en una mezcla de agotamiento y depresión. Se presentan dolores de cabeza y estómago y el paciente siente ganas de pasar todo el día en la cama. Su vida se desmorona. Bienvenidos a la pesadilla de la Fibromialgia.

Fibromialgia (del latín, fibra = fibra, tejido conjuntivo / del griego, mio =músculo y algia = dolor) es un término que se refiere a un grupo de síntomas y trastornos músculo-esqueléticos. Los síntomas, a menudo, se superponen con los de otras dolencias, como migrañas y dolores de cabeza, depresión, artritis, síndrome del intestino irritable, síndrome de fatiga crónica y trastornos del sueño. No está claro si estas condiciones tienden a coexistir con la Fibromialgia o son causados por ella.

Causa desconocida

La causa de la Fibromialgia aun se desconoce. Hay algunas pruebas que demuestran que puede estar relacionada con un funcionamiento anormal del sistema endocrino (hormonal) y el sistema nervioso autónomo. También se cree que los factores genéticos pueden desempeñar un papel importante. Algunos investigadores sospechan de anomalías en el tejido muscular, mientras que otros proponen una causa viral. Hay una variedad de factores que parecen desencadenar la enfermedad en individuos susceptibles a ésta. Los desencadenantes incluyen enfermedades virales, traumatismos, alteraciones crónicas del sueño y angustia emocional.

Diagnóstico

Los criterios formales de la American College of Rheumatology sugieren que se debe presentar dolor en, al menos, once de los dieciocho sitios clásicos. Sin embargo, los casos atípicos suelen ser bastante comunes, por lo que estos criterios deben ser considerados directrices en lugar de criterios estrictos. La condición debe ser diagnosticada por un médico con experiencia que busque un conjunto de síntomas, junto con las múltiples áreas de sensibilidad muscular. No hay exámenes disponibles para diagnosticar la Fibromialgia, pero un examen cuidadoso y pruebas de laboratorio pueden ayudar a descartar otras enfermedades.

Tratamiento

El tratamiento ayuda a mejorar enormemente la calidad de vida del paciente. Lo ideal es utilizar la estrategia de intervenciones multidisciplinarias. Se han divulgado varios medicamentos y, muchas veces, es mejor utilizar combinaciones de estos. Los medicamentos antidepresivos parecen aliviar los síntomas de dolor, alteraciones del sueño, fatiga y depresión. Algunos medicamentos como anti-inflamatorios y relajantes musculares pueden ayudar a reducir el dolor y la rigidez. Los resultados de las investigaciones, demostraron que el uso de interferón por vía oral arroja resultados alentadores. Los estudios actuales demuestran los beneficios de los medicamentos que bloquean los receptores nerviosos conocidos como receptores NMDA.

El ejercicio parece ser crucial, aunque difícil, durante el tratamiento. Los pacientes con Fibromialgia son extremadamente sensibles a la actividad y el esfuerzo y pueden experimentar brotes de dolor con mínimos ejercicios. Cuando se hace lento y adecuadamente, el ejercicio puede tener un beneficio terapéutico enorme. Además de la terapia física tradicional, los programas hechos a medida para la terapia de grupo y ejercicios de Tai Chi pueden ser muy útiles. Algunos elementos cruciales para superar el dolor, la debilidad y la depresión que acompañan a la Fibromialgia, son las terapias psicológicas, como el biofeedback, las técnicas de relajación, manejo del estrés y la terapia cognitiva-conductual. La terapia ocupacional puede ayudar al paciente a aprender a caminar y manejar las actividades diarias.

Tenga presente, sin embargo, que, al no haber un único tratamiento para la Fibromialgia, también abundan los tratamientos ineficaces e, incluso, tratamientos fraudulentos. La atención multidisciplinaria adecuada, con medicamentos y ejercicio, puede ayudar a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida. Por otro lado, afortunadamente, la investigación está mejorando poco a poco nuestro conocimiento y comprensión de la Fibromialgia.